Abro mis ojos y observo la ausencia
que antaño presenciaba las vivencias
de otra vida....otro rumbo...desvaríos
de una creencia ficticia pero supuesta
desde la cuna.
Abro mi mente y pienso en lo infinito
de la pobreza que enriquece telarañas
de perennes hilos entrelazados por las
causalidades de mi sino.
Abro mi alma, para así ahondar en los
misterios que guarda entre esperanzas
y desatinos, mientras anhelos, amores
y primores vividos rondan la aurora y
despuntan con nuevos bríos.
Abro mi Ser a la eternidad aforada en
brevedades oscilantes e inseguridades
perdidas en el vacío absoluto de tantos
minutos instruidos,cuando desdeñando
su existencia, se prendían en la esencia
y la mantenían cautiva en la minúscula
celda que sustentaba.
Abro paso al sufragio regalado y presto
siempre para el resto, en la negación de
la dicha intrínseca, emancipada por las
redenciones de absoluciones otorgadas
tras la exacta deuda abonada, expiada y
libertaria de quién se creyó presa algún
dïa.
Samsara